Sin control
Sin control
Espera lo mejor, preparate para lo peor

jueves, junio 17, 2004


El día ha empezado mal, pero va mejorando.

Esta noche ha sido horrible. Tanto Lluís como yo estamos con anginas*, lo que nos provoca roncar. Así que toda la noche ha sido un tuya mía. Cuando uno se dormía, roncaba tanto que despertaba al otro, y cuando éste por fin conseguía dormirse otra vez, despertaba al primero.

Así que he ido a trabajar con mucho sueño, y me he encontrado problemas. El sistema informático no funcionaba, y ha tocado trabajar el doble.

La cosa ha mejorado al mediodía, cuando Shak y yo nos hemos podido reunir por fin para ir a comer. El pobre me ha aguantado un rollo memorable, Erykah, este niño es un solete, ni tan sólo me interrumpía... no estoy acostumbrada a esto en casa! ;) Me he sentido casi de vacaciones, hablando, comiendo y echando unas risas... y luego en el corto paseo hasta casa, con el calorcillo, la sombre de los árboles y la suave brisa... casi era el paraíso.

Para colmo, he obligado al pobre Shaker a prometerme que me ayudara en la ardua tarea de comprar un ordenador nuevo... si lo conseguimos, te debo un favor de los gordos!

* Si, aunque parezca mentira, tengo anginas otra vez. Este invierno ha sido horrible, no quiero ni pensar las veces que me he puesto enferma por culpa de mis amigdalas hipertróficas y cavernosas. Normalmente, cuando empiezo el otoño poniéndome enferma, es una recaída tras otra. Pero este invierno ha sido el colmo. Y estamos en primavera-verano y sigo igual! Esta vez no ha pasado ni una semana desde que dejé de tomar antibiótico. Así que he tomado una determinación: voy a operarme. Mis amigdalas tienen los días contados.