Sin control
Sin control
Espera lo mejor, preparate para lo peor

jueves, noviembre 13, 2003


Advertencia: Si estais comiendo, o sois débiles de estómago, os recomiendo que no leáis este post. Os he avisado.

os pongo un dibujo porque una foto sería demasiadoBueno, pues ser madre tiene estas cosas: vives peligrosamente. Os lo voy a decir claramente: hace tres días que Jan tiene diarrea. Visto así, no da miedo ni nada. Pero si estuvierais en mi lugar...

Todo empezó el lunes. Cuando llegué por la noche, Lluís me comentó que Jan iba algo suelto (unas 6 o 7 deposiciones líquidas al día), y que se le habían enrojecido sus partes. Le dijimos a Vita que cambiara a Jan muy a menudo, y que le duchara en lugar de limpiarle con toallitas, para ver si mejoraba.

El pobre estaba TODO enrojecido, y el culete se llevaba la mejor parte. El pobrecito lloraba cada vez que le duchaba, parecía que iba a salirle una llaga. Me asusté mucho y empecé a darle agua de arroz como una loca. La papilla, con agua de arroz, para beber, agua de arroz... el pobre Jan no se quejaba, y eso que es asquerosa.

Por suerte la cosa ha ido mejorando. Las deposiciones no son líquidas, sino pastosas, y esta mañana, ni tan sólo estaba sucio el pañal! Yo emocionada. Me lo he llevado de paseo, y tampoco había ensuciado el pañal. "Está curado!", iba pensando yo... Pues a la hora de comer, Vita lo ha cogido y resulta que había soltado todo lo que llevaba guardando desde ayer por la noche. Ha quedado todo rebozado, la ropa, el pelo, el parque... no quiero dar más detalles porque aunque no estéis comiendo, no es plan. Pero lo que digo: ser padre es un trabajo de riesgo, jajaja.